Por décadas en Puerto Rico se ha estado jugando un juego de poder. Cada cuatro años un nuevo gobierno asciende al trono con una sola meta, extender sus influencias más allá del término. Como en el juego de ajedrez, la meta es hacer cada movida asegurando el jaque, buscar el control de todos los poderes y garantizar el "Banquete Total".Este banquete se ha venido cocinando por los pasados 60 años. Primero lo gozó el PPD y en el pasado cuatrienio el PNP agarró la olla por el mango. Mientras ellos se pelean el festín, nosotros seguimos pagando los platos rotos.En este, su primer libro, Jay Fonseca nos explica con lujo de detalle, cómo hemos llegado a donde estamos hoy y cómo la corrupción, prácticamente, ha logrado legalizarse. Pero más importante, de qué manera podemos comenzar a buscar una solución, para ir forjando un nuevo Puerto Rico.